martes, 11 de octubre de 2016

Noun

Lentamente volvió el felino a su ventana, de un zapatazo volcó al nauseabundo animal que robaba sus sueños a diario, instaurando el reminiscente insomnio que de vez en cuando la conciencia moral traía a su vida.
Por enésima vez el absurdo animal correteó por los tejados  danzando al son de la nocturna oscuridad de octubre. Asomó la cabeza por la ventana del joven, sus bigotes tactaban la molestia del dueño de casa, agachó las orejas y se dispuso a saltar, de pronto una  sandalia voladora le tumbó lanzándole lejos de su objetivo.
Lleno de ira el acosado se levantó y cerró la ventana a pesar del calor sofocante que se sumaba al insomnio, no cabía en su cabeza la causa de tanta insistencia  animal.
La madrugada avanzaba por el reloj inerme, las armas de guerra heredadas de su abuelo descansaban quietas en el rincón de la habitación.
Lisa,Ares y Hades esperaban ansiosos el final de la escena, de pronto un par de  ojos brillantes encendieron el oscuro dintel de la ventana, el joven se levantó lleno de ira, tomó la katana de su abuelo y arremetió en contra de la gata que aparecía enmarcada en su ventana, no le bastó una estocada, sino dos y tres, al cabo de terminada su ira, encendió la luz.
 Un charco de sangre en el piso acechaba tocar los rígidos pies del amo, la gata agónica yacía tumbada al costado de la cama, su blanquecino pelaje se tornaba oscuro y pegajoso a medida que se coagulaba el líquido que escurría de su cuerpo dañado... a lo lejos percibió la dulce mirada agónica y un leve ronroneo que indicaba que a pesar de todo, nunca dejaría de quererlo.



viernes, 12 de agosto de 2016

Requiem

Profundo y oscuro se vislumbraba el espacio en donde quedaría depositado el cajón. Sin adornos ostentosos, ni caras maderas para demostrar la opulencia carente en vida, una simple caja y nada más.
Hace tiempo las lágrimas hacían sequía en su vida, por lo que no aspiraba a derramar alguna en aquél suelo yermo en donde nunca nada floreció a pesar del reguero diario.
Abrió la caja y en ella dejó caer libros que quisieron ser un obsequio deslumbrante de una ignorante suposición de gustos, las joyas que nunca adornaron la vanidad de quien no las necesita, marcadores de libros con la utilidad que presta el viento a las hojas para hacerlas cantar, todas las fotografías juntos que sólo ella añoró...
El retumbar de la tierra encima de la superficie de madera fue el último adiós, último redoble soportado, último y retumbante recuerdo vaciado, último intento y último suspiro del cisne, que desvaneció la dicha de un día de invierno de junio, agorero de felicidad en fuga.

martes, 12 de abril de 2016

Nihili est qui nihil amat

 Sonido de trenos, aullidos nocturnos, llantos errantes,mariposas oscuras huyen de la entraña del amor perdido.
Tu imagen lejana destellando soles, luz escurridiza de mi sueño roto, los cabellos libres, la sonrisa plena, altivez benigna que latiga orgullo, que arrastra mis sombras,que fija su nudo.
Tu nombre engarzado a la verdad etérea, volátil pasión, sonrisa perdida entre jardines nuevos.
Luz de la dicha, cabalga en tu hueste que nadie sucumba ante tu designio, parta raudo el viento que acompaña tu viaje, que se abran caminos, que despejen las nubes, que la lluvia limpie tu paso divino.


lunes, 11 de abril de 2016

Requiem

El trino de las aves y un pálido rayo de luna la despertaron al filo de la madrugada, el cansancio hacía presa de su conciencia, miró a un costado y percibió el cuerpo del hombre amado. Admiró el pálido rostro, sus bellas facciones, el torso desnudo. Recordó las discusiones, los engaños soterrados, la ausencia de cuidados, las largas noches de espera al regreso de la juega semanal, el beso obligado, la caricia lastimera de los últimos días, el dolor del alma hacía eco en los oídos inflamados,  la ausencia de argumentos válidos acrecentaba la otitis que se empecinaba en atormentarla aún más .
Ya no la amaban, la desgarradora verdad no quiso salir del caracol auditivo y destruyó el tímpano en conjunto con el alma. Sin embargo el doctor tan sólo recurrió a señalar que era un resfrío mal cuidado.
Al darme la vuelta en la cama vi su espalda desnuda, lentamente me levanté y dirigí mis pasos a la cocina, hurgando en los cajones dí con el puñal perfecto, un movimiento rápido y feroz cortaría las venas del cuello del desalmado. La sangre salía a borbotones de sus venas, yacía el cuerpo inerte a su lado, ni un grito, ni un gesto de dolor, ni el placer de verlo sufrir, se fue en el acto.
Salió corriendo de la habitación empapada en sangre, chorreando los dedos del espeso y fuerte olor, resbalaba en el líquido sanguíneo que goteaba del cobertor, no podía levantarse, quiso gritar y no pudo, las lágrimas ahogaban su garganta, un grito desgarrador salió de su alma rota, despertando al único espectador.
Abrió los ojos, el trino de las aves y un pálido rayo de luna la despertaron, al filo de la madrugada, sudorosa por la pesadilla que acababa de tener, a su lado el gato negro la miraba con ojiverde dulzura, se acomodó entre sus piernas, mientras el ronroneo cómplice aliviaba la angustia y el dolor.


sábado, 17 de octubre de 2015

El premio mayor

Siempre se creyó astuta y hábil dentro de su círculo cercano,sin embargo el entorno familiar jamás reforzó positivamente esa creencia. Por suerte la idea estaba arraigada firmemente y tomada de uñas y muelas para que los fuertes huracanes que trataban de volcarla de su trono instaurado no la sacaran de allí. Tuvo la plena certeza de que las mujeres no vienen a este mundo a parir y su plan de vida iba rumbo fijo a ganar el mejor premio que la vida le pudiese ofrecer, evidentemente no cifraba sus anhelos en un hombre, menos en un par de hijos mal enseñados.
Tuvo que aguantar la misoginia imperante de los 90 en un "Chilito" a medias, con aires de Jaguar, en medio de doctores de filosofía que le enrostraron cada día su rol de subalterna educacional, primera victoria: titulo profesional, para el resto de los ojos una simple mujer a quien tendrán que mantener.
Para ella fue el primer peldaño que junto con su amor a las letras la llevarían donde deseaba estar, ya faltaba poco para llegar. En el intertanto tropezó con algún que otro ser humano que volvía a enrostrarle su capacidad animalesca y reproductiva como único medio para tener un cuento juntos, pero ella sabía que había algo más altruista destinado para si.
 Por suerte dio con un alma similar a ella, un ser de letras, lejano al submundo "chilensis", delicado y frágil, sensible, casi un niño pletórico de imaginación que desbordaba por sus ojos de miel. Se embarcó en el juego siendo casi la madre, pasaron muchos años y el viaje rumbo al cielo se detuvo casi sin darse cuenta, hasta que el juego cayó en la misma trampa anterior.
Decidió partir agobiada por la lucha incesante tratando de despegarse el rol, más sentía nadar en un pozo de alquitrán, el círculo vicioso giraba una y otra vez a su lado, pero se sabía hábil, astuta y valiente.
En madurez plena cansada y agotada por el peso de los años, solía sentarse a fumar en el fondo del pasillo de la casa que rentaba junto a otros como ella, allí lo conoció y se quedó a su lado, aunque no amaba las letras, ni la filosofía, ni  los buenos modales, medio sordo, medio cojo, medio artista, solía dejarla mucho tiempo sola para ir de juerga con el resto de ancianos. Un día mientras el hombre se quejaba incesantemente de dolores varios, vino a su recuerdo el anhelo juvenil del mejor premio de la vida, cantaba mientras fregaba el lomo del hombre y le relataba feliz sus sueños, de pronto un silencio profundo inundó la casa, ella preguntó: ¿Qué piensas de eso viejo?...el la miró desconcertado y un gran eructo hizo eco en el baño, una sonrisa se dibujó en sus labios, casi jugando con ella le dijo: eso pienso.
Se abrió de pronto el telón, fuegos artificiales sonaron a su alrededor, cayó desde el cielo una lluvia de papel picado y con todo el cotillón encima.
Con tristeza y algo de desilusión,  miró a lo lejos el premio mayor.



viernes, 24 de abril de 2015

Distopía

Siento miedo de lo que dejaste de ser, o quizás sienta miedo de lo que nunca fuiste.
Escucho tus letras ebrias de odio, a lo lejos te diviso y ya no estás, te miro frente a frente y no te encuentro.¿Dónde vas?
No es tu ropa ni tu rostro, ni la sombra del ayer. Que hizo el tiempo contigo, ¿Dónde estás?
Te llevaron de la mano por las sendas del amor, o del desamor, de la sordidez del despecho, ¿Regresaste?
 Fui testigo  del crimen con la sangre en mis narices, por tu falta de pulcritud, característica. Cómo siempre, nada había sucedido ¿Te fijaste?
Y aunque ya no estás, sigues presente en otros, rasguñando las entrañas con infantilísimas  miradas, con egoístas frustraciones, con decepciones, rompiendo ilusiones,matando pasiones,y van paseando legiones de símiles tuyos, o seré yo quien sigue
 reviviéndote en otros?


sábado, 21 de marzo de 2015

Círculo vicioso

Quiso romper el sortilegio de la madrugada  levantándose por el lado derecho de la cama, después de haber vivido la agonía del riñón que  de vez en cuando le recordaba por una semana su tiempo pisando la tierra.
Rauda, veloz y sonriente   se dirigió a su trabajo.
El metro detenido por el suicidio de uno más esta semana.
Treinta minutos de espera para abordar el microbús exacto.
Marcado de tarjeta: nueve y quince de la mañana, ladridos de poder varios...
Llamado telefónico: joven sin esperanza de vida, donadores de sangre:0
Ocho horas laborales cumplidas.
Rauda, Veloz a la universidad, tacos varios, sin muertes esta vez.
Entrevista: Proyecto rechazado.
Ni tan rauda, ni tan veloz, ni tan sonriente, regresa.
Noche calurosa, sequedad al máximo, vacío de sueños, amores y alegrías.
Se dejó envolver por la noche en un acto suicida, sin sueños, ni esperanzas ni proyectos.
Cinco de la mañana: Rauda, veloz y sonriente, se levantó por el lado derecho de la cama....