Se escuchaba un revolotear de
pasos en el piso de tierra, abrió los ojos soñolientamente, había llegado el padre con un saco de naranjas al hombro y un pequeño animalito a cuestas. Saltó de la cama
para verlo más de cerca, de pelaje café, ojos rasgados y dulces, de un balar tan
tierno que removió todas sus emociones, su corazón de niña latía de la emoción.
Breve saludo al padre y acatar la orden de alimentar al pequeño con hojas de
Llantén, el que por esa fecha crecía en abundancia a la orilla de la llave que
goteaba constantemente en el patio.
Convinieron con su hermano de
llamarle Mateo, por la prominente cabeza que desentonaba con el cuerpo ínfimo
de la criatura, se convirtió en la gran motivación para volver rápido de la
escuela, llegar por las tardes y jugar con él, el frío de Julio obligaba a
procurarle una camita para abrigarlo, era un hermano más dentro de la pequeña
familia del cerro, compañero de juegos y el Nene de la casa.
La madre arisca con el juego
prohibía permanecer mucho con el animal, porque había que estudiar, porque
había que dormir, porque debía descansar el animal,se mostraba reacia hasta los huesos de
llamarle Mateo, en fin, cosas de grandes que sólo ellos comprendían.
Se venía septiembre y las fiestas
patrias eran un gran acontecimiento para la mayoría, especialmente para ella
pues, terminado el desfile venía el helado de premio, ya que las manzanas del
colegio, jamás le gustaron, había que madrugar!!!.
Eran casi las cuatro de la mañana
cuando sintió el ajetreo de pasos, no abrió los ojos porque el padre se escuchaba
molesto, al hermano lo habían levantado, a ella no, sigilosamente bajó de la
cama para observar que sucedía, caminó descalza hasta el frontis del patio, ahí
estaba Mateo amarrado del cuello, entre dos lo sostenían, el hermano cabeza
vuelta sostenía una pata evadiendo los regaños del padre. Un oscuro hombre alzó
un cuchillo, y lo dejó caer entre el espanto de la madrugada y el balar
inocente del amigo.
4 comentarios:
Una vez me tocó hacerlo y fue comovsi lo hubiera clavado en mí. Me recordó la tristesa de de aquel fin de año. Saludos! !
Edd.
Me sucedió una vez , tuve que ser quien lo sujetaba. Fue como clavar un cuchillo en mi cuello. Triste muy triste. Gracias.
Edd
Jajajajaja no pensé que el anterior se había grabado. Lo siento.
No hay problema, me alegra identificar al menos a alguien además de mi. saludos
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